El sábado nos invitaron a un asado. Teníamos que llevar algunas bebidas y dos o tres guarniciones que podían ser papas, ensaladas, lo típico. Obvio que preparé unas papas riquísimas pero decidí llevar alguna de mis innovaciones culinarias para aprovechar a compartir.
Este plato me pareció muy adecuado para acompañar porque son unas berenjenas que no llevan queso derretido ni nada parecido. El queso queda medio raro cuando se calienta y recalienta así que preferí evitarlo.
Fuimos con estas berenjenas alimonadas frescas y riquísimas porque bien se pueden comer calentitas o frías.
Lo que lleva (como para 5 porciones):
Berenjenas
1
K en cubos con piel
Champiñones 1 taza en cuartos
Cebolla de verdeo 1 U en trozos
Aceitunas negras 3 cucharadas, sin carozo
Sabor al horno limón y orégano 1 U
Paso a paso:
1- Retirar la bolsa para hornear del envase. Abrir la bolsa
con cuidado y separar el precinto. Colocar la bolsa sobre una fuente y agregar los vegetales, las aceitunas, el aceite y el saborizador.
2- Mezclar cuidadosamente con el saborizador y cerrar la
bolsa con el precinto.
3- Precalentar el horno a temperatura media (160 ºC) y
hornear por, aproximadamente, 45 minutos o hasta que esté dorado. Retirar del
horno y cortar la bolsa teniendo cuidado con el vapor.
4- Para más dorado, podés cortar la bolsa a los 30 minutos y dejar por 15 minutos más. Si preferís, también podés mezclar el saborizador con los vegetales en un bowl, colocarlo en la bolsa, cerrar y llevar al horno.
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